Irán arresta a seis ex musulmanes por convertirse a Cristo
Declarar a un cristiano convertido en la República Islámica de Irán significa poner su vida en riesgo permanente. Esto, porque, no se permite abandonar el islamismo para adoptar otra religión. Esta es una determinación del Estado, fundamentada en la propia doctrina legislativa musulmana, o “sharia”.
En consecuencia, innumerables ex musulmanes son perseguidos, torturados, presos e incluso ejecutados por la fe en Jesucristo. Fue lo que sucedió, por ejemplo, con seis cristianos recién convertidos en la ciudad de Rasht, en el norte de Irán.
Khalil Pour-Dehghan, Hossein Kadivar, Abdolreza Ali Haghnezhad, Kamal Nemanian, Mohammad Vafadar y Mohammad Eslamdoost fueron arrestados porque decidieron abandonar el islam para seguir el Evangelio de Jesucristo. Ellos optaron conscientemente a abandonar la propia libertad por amor a la única Verdad revelada por Dios.
Estas prisiones son comunes. Según informaciones del IRAN HRM, una organización que monitorea violaciones humanitarias en el país, cada mes se hace un levantamiento de los casos que involucra persecución, arresto y otras agresiones a la libertad religiosa en el país.
Un número altísimo de prisiones y decretos de pena de muerte fueron contabilizados en Irán en la última década, además de las violaciones que involucra derechos políticos y violencia de género.
