La aplicación de sustancias para la transición de género en los niños perjudica al cerebro, dicen los médicos
Los médicos y la madre de un niño que se está identificando como transgénero están pidiendo al gobierno de Estados Unidos que cierre las operaciones médicas que están perjudicando a los niños.
Sus esfuerzos para resistir la medicación proceso de transición de género les llevaron a descubrir que la investigación financiada por el gobierno ahora permite que las hormonas del sexo opuesto, como la testosterona, se aplican en las niñas a partir de 8 años.
En un panel celebrado el pasado jueves por la Fundación Heritage, un centro de estudios conservador, el Dr. Michael Laidlaw abordó los daños médicos de los tratamientos hormonales e intervenciones quirúrgicas realizadas en jóvenes que creen que han nacido en el cuerpo equivocado “.
“Los médicos que administran estos tratamientos están defendiendo esas prácticas perjudiciales en niños cada vez más jóvenes”, explicó.
Según Laidlaw, que actúa como endocrinólogo en California, hoy, escenarios médicos como chicas de 13 y 14 años sometidas a mastectomías dobles y chicos de 17 años con pene atrofiados, como de niños de 9 años de edad, a causa de bloqueadores de la pubertad química , se están volviendo cada vez más comunes.
“Bajo el concepto nebuloso de ‘identidad de género’ ( ideología de género ), los niños de hasta ocho años está recibiendo inyecciones para el tratamiento transición de género”, dijo.
En un caso reciente que fue al tribunal como el “sentido interno central”, una persona afirmó que su propio género era el “factor principal” en la determinación de su sexo y no la biología.
“Eso es falso”, dijo el endocrinólogo en respuesta al caso.
Ningún examen de sangre, pruebas genéticas o exámenes de imagen cerebral pueden encontrar una “identidad de género”, dijo Laidlaw, añadiendo que “no hay prueba objetivo para diagnosticar eso, pero terapias muy perjudiciales en base a ningún diagnóstico objetivo se están aplicando”.
Hasta el momento, los bloqueadores de hormonas como el Lupron, utilizado para tratar a pacientes con cáncer de próstata y niños con pubertad precoz, nunca pasaron por un proceso de aprobación del Departamento de Medicación y Alimentos de Estados Unidos. Laidlaw se refiere a los bloqueadores de la pubertad como una forma de “terapia de conversión química” y observó que la mayor asociación profesional para endocrinólogos, la Endocrina Society, recomienda ahora retrasar la pubertad en jóvenes con disforia de género en la etapa 2 de Tanner, que es inmediatamente después de las señales pubertales que ocurren en el cerebro.
La razón por la que Jazz Jennings, la joven “celebridad” transexual de la serie transmitida por la emisora TLC, “Yo soy Jazz”, supuestamente nunca tuvo ninguna sensación sexual o orgasmo es porque su pubertad natural fue interrumpida en esta etapa y no se permitió la ocurrencia, explicó el médico de California.
“Estas drogas bloqueadoras de la pubertad también perjudican el desarrollo normal del cerebro y de los huesos, poniendo a los niños en riesgo futuro de osteoporosis”, dijo.
Europa
En Inglaterra, el profesor de Oxford Michael Biggs descubrió, a través de una solicitud de libertad de información, que en la clínica de género Tavistock niños relataron mayor auto-agresión con estos medicamentos específicos, y las niñas presentaron mayores problemas emocionales e insatisfacción con sus cuerpos , señaló Laidlaw.
“Ahora usted piensa que si usted tiene estos efectos secundarios de estos medicamentos, usted no querría parar?” Preguntó Laidlaw.
Durante su presentación, él exhibió videos de dos médicos activos en la transición de género en niños, Ilana Sherer y Johanna Olson-Kennedy.
Sherer explicó que los bloqueadores de la pubertad se administran a los niños a los 8 o 9 años cuando están en el tercer y cuarto años. Olson-Kennedy está haciendo un estudio de cinco años, por el cual recibió un subsidio de investigación de los National Institutes of Health de 5,7 millones de dólares y, en una de sus publicaciones, muestra que las mastectomías fueron hechas en niñas a partir de los 13 años de edad. Laidlaw mostró que Olson-Kennedy se ve en la cinta insistiendo en que los adolescentes tienen la capacidad de tomar decisiones con consecuencias permanentes para sus vidas, incluso en el caso de las niñas removiendo sus senos.
“Y aquí está la otra cosa sobre la cirugía de remoción de los senos: si quieres senos más tarde, puedes ir a recogerlos”, dice en el vídeo.
Laidlaw preguntó a los presentes: “¿Está correcto, comprar un nuevo órgano, recibirlo por correo y pedir que los cirujanos lo coloquen? Usted no puede simplemente hacer eso”.
“Esta es toda un experimento con niños, estamos ignorando las voces de las personas que salieron de eso y reconocen su verdadero sexo, su sexo biológico, y el Instituto Nacional de Salud está permitiendo que investigaciones antiéticas como éstas sean conducidas con adolescentes”, advirtió.
Laidlaw y sus colegas utilizaron los pedidos de FOIA para obtener más información sobre el estudio de Olson-Kennedy en el Hospital Infantil de Los Ángeles y descubrieron que en 2017 redujeron la edad mínima para la aplicación de hormonas sexuales en niños de 13 a 8.
“Imagine aplicar la testosterona en las niñas de 8 años”, dijo Laidlaw. “Ellos están en la 3ª o 4ª serie, eso es increíble, pero eso está sucediendo”.
