“Habría muerto si Dios no me hubiera protegido” dice pastor tras 2 años preso en China

El pastor Zhou Dixian fue arrestado hace dos años acusado por las autoridades chinas de supuestamente “provocar problemas”, el pasado viernes, tras el pleno cumplimiento de la sentencia. El ministro dice que durante el período en prisión sufrió malos tratos y el trabajo forzoso.

“Yo habría muerto de los maltrato si Dios no me hubiera protegido y los hermanos, las hermanas cristianos no oraran por mí”, escribió el pastor Zhou, en una carta abierta el 31 de marzo, diciendo que finalmente logró ver a sus familiares y estaba agradecido por aquellos que lo apoyaron.

En la carta que describe el tratamiento que recibió de las autoridades chinas en la cárcel, en particular obligándolos a dormir de lado, lo que causó un dolor insoportable en los hombros y la espalda. También fue forzado a trabajar desde que se levantaba hasta acostarse, abriendo calamares en el agua salada, lo que causó infecciones y pérdida de uñas. 

Zhou cuenta que cuando pidió remedios para que él pudiera tratarse de esas infecciones, las autoridades lo negar y prohibir a su hijo de comprar los medicamentos para él.

Al salir de la prisión, una de las primeras cosas que el pastor Zhou Dixian hizo, la misma noche, viajó a Pekín para proteger sus derechos y cultos en una iglesia de la capital.

Antes de su arresto, Zhou fundó una iglesia que no estaba registrada en el gobierno, una acción que su hijo cree haber contribuido a que las autoridades lo arrestar. Ahora que ha sido liberado, el pastor que reanuda su iglesia. La familia dice estar preocupada que, por eso, el gobierno pueda arrestarlo nuevamente. 

En noviembre de 2012, las autoridades demolieron la casa de Zhou, donde vivía con su esposa, Li Yuzhen, y destruyó su huerto de manzanas. La policía local se negó a asumir el caso, alegando que las acciones vinieron del gobierno, y así Zhou tuvo que viajar a Pekín para relatar la cuestión a los funcionarios superiores.

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