Familia musulmana asesina a su propio hijo por convertirse al cristianismo

La violencia contra los seguidores del cristianismo no mide la distancia de los lazos de sangre. Cuando se trata del radicalismo religioso que involucra al mundo musulmán, el pasaje en Lucas 12:53, que describe el conflicto entre padres e hijos en el contexto familiar, parece cumplirse fielmente.

Está escrito: “El padre se dividirá contra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la hija y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, y la nuera contra su suegra.

En un caso reciente en Egipto, un joven recientemente convertido al cristianismo que abandonó el Islam fue asesinado por su propia familia. Hussein Mohammed había adoptado el nombre de George en las redes sociales. En su cuenta de Facebook, el niño publicó fotos con el símbolo de la cruz en su muñeca.

Al descubrir la conversión de Hussein, la familia lo asesinó, según la información del portal Padom . Como este, hay muchos otros casos de violencia doméstica contra seguidores del cristianismo en países de tradición musulmana.

La Misión de Puertas Abiertas dio a conocer el testimonio de un joven ex musulmán que dijo que fue criado para matar cristianos como “una puerta directa al cielo” y que él mismo sería asesinado si dejara el Islam para convertirse en cristiano.

A pesar de todo, el joven Ibraim, cuyo nombre real se omitió por razones de seguridad, se acercó al Evangelio por curiosidad y terminó conociendo la verdad sobre la fe en Dios revelada en la persona de Jesucristo.

“Sabía que mi conversión causaría vergüenza a la familia, y cuando la encontraba, su reacción siempre sería tratar de matarme. Por esa razón, nunca me atreví a decirles nada porque sabía que sus amenazas no solo serían verbales, sino que realmente tratarían de matarme ”, dijo.

Ibraim tuvo que alejarse de su familia para preservar su vida, pero no se alejó de Cristo. Actualmente es uno de los miles de jóvenes ex musulmanes que enfrentan persecución religiosa en sus países de origen, todo por el bien de Jesucristo.

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