Pastores demandan a juez por prohibir cultos en Texas

Un grupo de pastores del condado de Texas, están demandando a un juez por la llamada orden de “quedarse en casa”, ya que según argumentos “viola su derecho a la libertad religiosa” de continuar celebrando las reuniones o cultos religiosos.

En la demanda se busca detener una orden de la jueza electa del condado de Harris, Lina Hidalgo, promulgada el mes pasado que instruye a los residentes del condado a permanecer en sus hogares, excepto para los viajes esenciales a la tienda de comestibles y cuando viajan para trabajar para empleados esenciales.

La orden exigía el cierre de todos los negocios no esenciales, incluidas las iglesias.

“Los relatores y aquellos en situación similar tienen sus derechos constitucionales y los derechos constitucionales de sus congregantes continuamente infringidos mientras se permita que la orden del juez Hidalgo permanezca en su lugar”; se lee en la presentación de la demanda por los pastores.

Según los demandantes, la orden por parte de la Jueza Hidalgo del 24 de marzo se impone multas e incluso encarcelamiento para personas que operan negocios no esenciales, se congregan fuera de las residencias, operan una tienda de armas o asisten a servicios religiosos en persona.

En la petición del grupo de pastores también se expresa: “Es necesario el alivio de emergencia del mandamus de esta Corte para evitar que la Orden draconiana e inconstitucional del juez Hidalgo perjudique más e infrinja los derechos fundamentales garantizados a quienes viven en el Condado de Harris, Texas”.

Están violando sus derechos religiosos
Partiendo de la Primera Enmienda de Estados Unidos todos tienen derecho a practicar una religión libremente y también se tiene el derecho de reunirse pacíficamente.

“Si una iglesia quiere tener servicios en línea, ese es su negocio. Pero si queremos reunirnos, esa es nuestra elección, no la elección del gobierno. Es una tiranía para que el gobierno nos imponga esto. Por eso me opongo .

Jared Ryker Woodfill se une también a esta demanda, el fue presidente del Partido Republicano del Condado de Harris , y piensa que los derechos de los pastores han sido claramente violados por el orden inconstitucional de Hidalgo”.

Los pastores afectados son: Juan Bustamante de City on a Hill Church en Houston, George Garcia de The Power of Love Church en Houston y David Valdez del World Faith Center de Houston.

Para Woodfill esta acción se trata de algo “atroz y draconiano” cuando consideras el hecho de que si eres pastor y eliges celebrar un servicio, estás buscando una multa de $ 1,000 y hasta 1 año en la cárcel”, dijo.“Si eres un individuo y eliges ir a la iglesia, estás buscando una multa de $ 1,000 y hasta un año de cárcel. En eso se ha convertido el condado de Harris hoy .

“Es por eso que han decidido tomar una posición”, agregó. “Solicitar a la Corte Suprema de Texas que analice esto de forma urgente y considere que esta orden es inconstitucional”.

“Cuando un juez decide pisotear las libertades y libertades fundamentales que cientos de miles de personas han dado sus vidas para que las disfrutemos, eso es algo que debemos tomar muy en serio” dijo.

Agregó que espera que un fallo a su favor envíe un mensaje claro a otros jueces de todo el estado que decidan implementar órdenes similares.

Gobernador permisible y propone medidas para las reuniones
Dos días después de que se presentó la demanda, el gobernador republicano de Texas Greg Abbott y el fiscal general Ken Paxton emitieron una guía conjunta que define los servicios religiosos como “servicios esenciales” en virtud de una orden ejecutiva firmada por Abbott que insta a los tejanos a obedecer las pautas de distanciamiento social.

“Si los servicios religiosos no se pueden realizar desde el hogar o mediante servicios remotos, deben realizarse de conformidad con las Directrices del Presidente y los Centros para el Control de Enfermedades practicando una buena higiene, limpieza ambiental y saneamiento, e implementando distanciamiento social para prevenir la propagación de COVID-19 ”, se lee en la guía conjunta. Las pautas de los CDC exigen que las personas eviten reuniones de 10 personas o más