DECADENCIA… Madre gana en la corte la transición sexual de su hijo de 8 años y le quita los derechos al padre por no apoyarla

La batalla legal de jeffrey Younger para tratar de proteger la conciencia y el desarrollo de su hijo de 8 años contra su propia madre ha ganado un nuevo capítulo. La mujer ganó en la corte el derecho a continuar con su plan de imponer la “transición sexual” al niño.

Divorciado, Jeffrey Younger había ganado el derecho a la custodia de su hijo en la corte. Incluso fue procesado penalmente por su ex esposa por no admitir que el pequeño James Younger era transexual.

Cuando el niño se quedó con su madre, ella lo trató como a una niña, alegando que el niño se vería a sí mismo como tal. Sin embargo, Jeffrey declaró ante el tribunal que el hijo no pretendía ser una niña, sino que en su presencia se comportaba con naturalidad como es, un niño.

En otras palabras, según el padre, la madre del niño estaría induciendo el comportamiento y la mente de James para que pudiera verse a sí mismo como una niña, especialmente porque con tan solo 8 años el niño se está desarrollando, necesitando ser orientado sobre su propio sexo, y no el contrario.

En una decisión anterior, tomada por el juez Kim Cooks, quien le dio al padre la victoria sobre la custodia de James, el propio magistrado reconoció que la madre del niño estaba induciendo su comportamiento.

Cooks notó, por ejemplo, que la mujer llevó al niño a desfiles LGBT, le compró vestidos y cabello falso para que él usara y la inscribió en la escuela como una niña transgénero llamada “Luna”, según el Crhistian Post .

A pesar de las acusaciones del padre y la evidencia evidente de la alienación del hijo de su madre, sin embargo, la jueza de Dallas Mary Brown canceló una audiencia que estaba programada para este martes y eliminó el derecho de Jeffrey Younger a tener voz en el cuidado. la atención médica, psicológica y psiquiátrica de su hijo.

Por otro lado, el juez otorgó plenos poderes a la madre del niño, Anne Georgulas, quien por cierto no es la madre biológica de James. Si ninguna otra apelación revoca la decisión, la mujer ahora puede opinar sobre qué hacer con el desarrollo sexual del niño.