Los jóvenes aceptan a Jesús y se bautizan durante un entrenamiento de fútbol en EE. UU.
La práctica de fútbol americano los sábados es más que un momento deportivo para los estudiantes de Coosa Christian High School en Alabama, Estados Unidos. El entrenador del equipo escolar ha utilizado su influencia sobre los adolescentes para evangelizarlos .
Todos los sábados, el entrenador Mark O’Bryant lleva a diferentes pastores locales a practicar. “Entrenamos de 12 a 15h. Luego, tenemos un servicio de unos 30 minutos para llevar la historia de Jesús a los jugadores. Ha sido gratificante ”, dijo al Gadsden Times.
Para O’Bryant, “una buena manera de que los jugadores aprendan sobre las Escrituras es llamar a un orador invitado cada semana”.
La escuela está asociada con The Church at Wills Creek. Por lo tanto, además del plan de estudios educativo regular, los estudiantes participan en estudios religiosos.
En un sábado reciente, ocho de los jugadores aceptaron a Jesús como su Salvador. Una semana después, cinco más hicieron lo mismo y los 13 pidieron ser bautizados. El entrenador organizó el bautismo en el campo durante una sesión de entrenamiento el martes por la tarde.
O’Bryant trajo un tanque, lo llenó de agua y el pastor visitante Scott Wright bautizó a cada uno de los 13 jugadores que habían consagrado sus vidas al Hijo de Dios.
El emocionante bautismo estuvo acompañado por una gran multitud de estudiantes y padres. La directora de Christian College, Amanda Justus, elogió la ceremonia que se llevó a cabo en el campus.
Dijo que O’Bryant se ha centrado en lo que es más importante para los jugadores. “Su objetivo es ayudar a transformar a sus jugadores en jóvenes disciplinados y resistentes que tengan una relación con Cristo que los sostendrá de por vida”, dijo Justus.
El director agregó: “Es nuestro deseo en Coosa Christian capacitar a nuestros estudiantes para que sean hombres y mujeres de Dios que van a hacer una gran diferencia en este mundo para Cristo. Las decisiones de salvación y bautismos son un resultado directo de la fidelidad del entrenador O’Bryant, quien ha honrado el llamado de Dios para ministrar y testificar a los demás ”.
