“Aprendí el valor de la fe” Sobreviviente de accidente aéreo se acerca a Dios después de la tragedia

Kechi Okwuchi nacida y criada en Nigeria,  siempre ha tenido la música como un pasatiempo importante, que se convirtió en terapia después de un día trágico en 2005. Estaba en un vuelo con 60 estudiantes del Loyola Jesuit College, una escuela cristiana en Abuja.

En la tarde del 10 de diciembre de 2005, el vuelo 1145 de Sosoliso Airlines partió de Abuja hacia la ciudad nigeriana de Port Harcourt. La aeronave con 110 personas a bordo hizo un aterrizaje forzoso en el Aeropuerto Internacional de Port Harcourt y golpeó el suelo, lo que provocó una explosión.

“A quince minutos del final del vuelo, el piloto anunció que pronto aterrizaríamos en el aeropuerto de Port Harcourt. Estaba sentado en una silla en el pasillo junto a mi amigo Toke. De repente, todo se veía diferente. Estábamos bajando demasiado rápido”, dijo Kechi a la revista Daily Word.

“Alguien respondió: ‘¿Está intentando aterrizar este avión?’ Me volví hacia mi amigo y nos tomamos de la mano. Le pregunté ‘¿qué piensas de rezar?’, Pero antes de que pudiéramos empezar, escuchamos un sonido fuerte y lo siguiente que recuerdo fue despertarme en el Hospital Milpark en Sudáfrica. Hasta el día de hoy no recuerdo el impacto real accidente”, agregó.

Poco después del accidente, siete sobrevivientes fueron rescatados y trasladados a hospitales, pero solo dos personas sobrevivieron. Entre ellos se encuentra Kechi, quien sufrió quemaduras en más del 65% de su cuerpo.

Fe despierta

Kechi pasó los siguientes siete meses en el hospital, la mayor parte de ese tiempo en la UCI y tuvo más de 100 cirugías. Ella cree que su fe, su familia, sus amigos y su música fueron los mayores incentivos para mantenerla con vida.

Antes del accidente aéreo, Kechi conocía a Dios solo a través de la fe de su madre, como alguien que debería ser respetado y temido. Pero durante su estadía en el hospital, se acercó a Dios y comenzó a tener una relación personal con el Señor.


Imágenes de Kechi Okwuchi antes y después del accidente aéreo en Nigeria. (Foto: Palabra diaria)

“De hecho, no hay nada como la oración. Esto fortalece su fe y le da valor. Te calma cuando las cosas se ponen realmente difíciles de manejar. Si hay algo que aprendí de esa experiencia, es el valor de la fe ”, dijo Kechi.

Se fue a los Estados Unidos en 2007 para una cirugía reconstructiva y luego se inscribió en la Universidad de St. Thomas, donde se graduó en 2015 con Summa cum Laude, una mención de honor para los graduados con un promedio superior a 9, 5.

En sus palabras de aliento, Kechi dice: “Sigue adelante. Cualquier obstáculo que crea que está bloqueando puede ser superado. No importa quién sea y dónde se encuentre, siempre encontrará obstáculos. Nunca desista. Alguien, en algún lugar, está pasando por lo mismo o algo peor. Más adelante mirarás hacia atrás y verás cómo has podido sobrevivir y encontrar la confianza para superar cualquier desafío en el futuro ”.

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