Milagroso.Una niña paralitica es sanada después de la oración de los niños en un retiro.

En un servicio cristiano, se llamó a niños y adolescentes a orar en el altar del retiro en los Estados Unidos. El predicador de la noche, el pastor David Willis, primo de los padres de Joy, fue llevado a orar por ella.

David fue con el padre de Joy, el pastor Robbie Willis, y compartió lo que había sentido de parte de Dios y pidió reunir a los niños para orar por la curación de Joy. “La mayoría de los niños que vinieron a orar por ella tenían 12 años o menos”, señala.

“Recuerdo que cuando me arrodillé a su lado, escuché a Dios decir en mi espíritu que iba a sanar a Joy, pero en Su tiempo”, dijo David a AG News. “Entonces Él dijo que era el momento, pero que iba a usar a los niños para hacerlo“.

Mientras tanto, Dios habló con Jaelyn, una amiga de Joy de 12 años. “Estaba levantando mis manos y alabando durante la adoración. De repente sentí una gran oleada de felicidad y gozo y Dios dijo: ‘Esta noche van a suceder dos cosas maravillosas: Becky (otra amiga) va a recibir el Espíritu Santo y Joy va a ser sanada y caminar de nuevo. Y quiero que les digas eso.

Así mismo Mientras los niños de la iglesia oraban fervientemente por Joy Willis, de 14 años, en su silla de ruedas , su hermano Tim le susurró al oído: “En la Biblia, cuando Jesús hizo caminar a los cojos, tuvieron que elegir levantarse

Joy confiesa que cuando Jaelyn se lo dijo, se sintió abrumada por el miedo de que su amiga estuviera equivocada. Pero dejó a un lado sus dudas y continuó alabando a Dios.

Poco después, a pedido de David, los niños comenzaron a reunirse alrededor de Joy, orando por su curación. Jaelyn no tenía ninguna duda de que Dios se estaba preparando para cumplir Su promesa. “Sentí la presencia de Dios corriendo por mis dedos”, dice Jaelyn.

Después de unos 20 minutos, el hermano de Joy, Tim, le susurró las palabras de Jesús al oído, animando a su hermana a elegir ponerse de pie y aceptar la sanidad de Dios. Desde el momento en que Joy se levantó, las cosas empezaron a suceder una tras otra.

Robbie dice que Joy dio algunos pasos, alentada por su fe, y luego pidió ayuda para quitarse el aparato ortopédico del tobillo. Cuando Joy se puso de pie, empezó a caminar y trató de levantar los brazos en alabanza a Dios, algo que no podía hacer debido a su enfermedad.

“Al principio no estaba mejorando, pero cuanto más levantaba los brazos, mejor se sentían”, dice Jay. En unos momentos, caminaba con las manos en alto, alabando a Dios.

“Abrí los ojos por un momento”, dijo Cheyenne, de 12 años. “Miré y vi a Joy. Yo estaba como, ¿cuándo empezó a caminar? Estaba muy sorprendido. ¡Le quitaron la tobillera y la silla de ruedas estaba vacía! “