Misioneros estaban sentenciados a morir pero un gesto de bondad llevo a sus enemigos a Jesús

Compartir la fe en Jesucristo es un acto de valentía para miles de misioneros cristianos en todo el mundo, ya que significa jugarse la vida en diferentes regiones, como Nigeria, país que ocupa el séptimo lugar en el ranking de las 50 naciones donde se practica la persecución religiosa mas intenso.

Un ejemplo de esta realidad es el testimonio del misionero Oscar Amaechina, presidente de la Red Afri-Misión y Evangelismo. Relató cómo su vida y la de otros hermanos en la fe fueron amenazadas por radicales armados con machetes en el país africano.

“Estábamos ministrando a la gente, y algunas personas vinieron a matarnos. Confesaron que estaban allí para matarnos”. A pesar de conocer bien la región, precisamente porque estaba evangelizando en Nigeria, el misionero quedó impactado al enfrentarse a una situación tan grave ante sus ojos.

“Los vimos con sus machetes, los vimos con sus espadas y creemos que ese sería nuestro último aliento”, dijo Oscar sobre el episodio. Afortunadamente, una simple actitud de amor al prójimo cambió por completo la situación.

Esto se debe a que, al observar la precariedad social de los radicales, los misioneros decidieron ofrecer ayuda con víveres y otras necesidades básicas. El gesto de bondad, incluso frente a una amenaza real, cambió la visión de los nigerianos sobre los evangelistas.

“Les dimos arroz, espaguetis, crema y sopa… y se alejaron de nosotros”, dijo el misionero. “Regresaron y uno de sus líderes nos habló a través de un intérprete y dijo: ‘Estábamos aquí para matarlos. Como somos pobres, nunca nadie nos ha dado nada, pero por esta actitud queremos ser cristianos’”.

Con eso, Oscar y los otros misioneros se dieron cuenta de lo importante que es ser testigos del amor de Cristo también, a través de actos de bondad, mientras hablan por sí mismos sobre el evangelio y de una manera transformadora.

“Los llevamos a Cristo. Fue maravilloso, fue increíble”, dijo. “Desde ese día, nunca nos hemos resistido a mostrar bondad. Hay poder en la bondad y el amor y eso es en lo que creemos en el ministerio”.