Pastor es asesinado por su propia familia por convertirse a Cristo, ¡querían que fuera un sacerdote musulmán!

Seis años después de que Bashir Sengendo se convirtiera del Islam al cristianismo, su familia musulmana lo golpeó y lo cortó tan severamente que murió 12 días después.

Sengendo, de 35 años, de Namutumba, Uganda occidental, dejó una familia de cuatro cuando falleció en el hospital después de sucumbir a las heridas infligidas por su propio hermano y su tío.

“La familia necesita mucho apoyo financiero, moral y psicológico”, dijo un pastor del área de Kiboga a Morning Star News, que rastrea la persecución de los cristianos en el Medio Oriente y África.

Bashir Sengendo fue criado como musulmán y entrenado para convertirse en líder de una mezquita. Pero se convirtió a Cristo después de hablar con un ex musulmán. Sengendo dejó su ciudad natal y estudió en una universidad bíblica de Uganda antes de servir como pastor en Kiboga durante seis años.

Su familia inmediata le envió mensajes para que regresara a casa y cuidara las tierras de cultivo que eran su parte de la herencia. Sengendo se mostró reacio a regresar porque quería seguir cumpliendo con su llamado a Kiboga.

Después de seis años, Sengendo accedió a las súplicas de su familia de regresar a casa. No tenía idea de lo que le esperaba.

Llegó el 12 de enero. Si pensó que la familia lo recibiría calurosamente, estaba muy equivocado. La familia era abiertamente hostil.

Se sorprendió por su fría recepción y durmió sin comer.

Temprano a la mañana siguiente, su hermano y su tío cayeron sobre él con violencia.

“Me golpearon mucho. Me cortaron con un objeto en la cabeza, la espalda y la mano”, dijo Sengendo a Morning Star News después del ataque, mientras rondaba entre la vida y la muerte en el hospital.

“Mi tío dijo que la familia gastó mucho dinero en entrenarme como maestro musulmán y que he causado mucha vergüenza a la familia y a los musulmanes en general”, agregó.

Sus vecinos escucharon sus gritos y llamaron a la policía. El herido fue llevado al hospital de Namutimba, pero ya había perdido gran cantidad de sangre y sufría heridas graves.

El 25 de enero, 12 días después del feroz asalto, Sengendo murió.

En lo que se refiere a la ley oficial, Uganda tolera todas las creencias religiosas y permite la conversión por conciencia. Pero existe una fuerte tradición islámica de que las familias perpetren “asesinatos por honor” para expurgar a los “infieles”.

Tales incidentes continúan ocurriendo, pero los medios liberales, que a menudo promueven el Islam como una “religión de paz”, hacen la vista gorda.