Globoplay planea serie sobre jóvenes gay ‘evangélicos’

Globoplay y sus intenciones

En los últimos años, un movimiento que trata de desacreditar la doctrina bíblica sobre la sexualidad ha ido lanzando iniciativas que intentan transmitir la idea de que la homosexualidad no es pecado. Y el movimiento más reciente en esta dirección lo está haciendo Globoplay.

La empresa de streaming del Grupo Globo produce, en sociedad con Kondzilla, una serie sobre un chico “evangélico” que se enamora de otro hombre. El título de la serie, que solo se emitirá en Globoplay, es O Filho do Amor.

Kondzilla se convirtió en el productor más buscado por los artistas del funk, un segmento marcado por un contexto, desde las letras, de apología de la promiscuidad, la prostitución y el abuso de drogas.

El productor, que ha ampliado su área de actuación, ya lideró un proyecto para Netflix que también contenía un personaje que asistía a una iglesia evangélica, y también se ha arriesgado como actor en otro proyecto de Globoplay, la película Core.

Según información del portal Metrópoles, Kondzilla también ha trabajado en otro proyecto para el canal Multishow , también propiedad del Grupo Globo.

Resistencia

Aunque hay numerosos intentos de deconstruir las doctrinas bíblicas sobre la sexualidad, hay líderes en el medio evangélico dispuestos a exponerse para resistir las influencias seculares y progresistas.

Una de esas figuras ha sido el pastor André Valadão, quien, a través de sus redes sociales y también a través de los sermones transmitidos en los canales de la Iglesia Lagoinha Orlando, toma una posición clara y franca sobre los valores y principios innegociables de la fe cristiana en esta área.

En septiembre de 2020, a André le preguntaron en sus redes sociales sobre las relaciones homosexuales en la iglesia: “Dos chicos que son miembros de la iglesia están saliendo, ¿los echas? ¿O lo dejas en la iglesia?”, preguntó un seguidor.

El pastor de la Iglesia Lagoinha Orlando, en Florida (EE.UU.), explicó su razonamiento sobre el tema, diciendo que la presencia de personas como parte de una congregación presupone estar de acuerdo con los principios y valores del cristianismo:

“Entendí, son gays entonces, la iglesia tiene un principio bíblico, y la práctica homosexual se considera pecado. Pueden ir a un club gay o algo así, pero en la iglesia no se puede, esta práctica no concuerda con la vida de la iglesia”, señaló el pastor.

En la conclusión de su respuesta, el pastor señaló que, por parte de los cristianos, es necesario tener cuidado con lo que podría entenderse como una ocupación progresiva en la iglesia: “Hay muchos lugares donde los homosexuales pueden vivir sin ningún tipo de vergüenza, pero en la iglesia es un lugar para aquellos que quieren vivir los principios bíblicos. No se trata de que la iglesia expulse, se trata de entender el lugar de cada uno”, concluyó.

La publicación fue “impresa” y compartida ampliamente en las redes sociales, y los portales LGBT tuvieron un impacto negativo en el comentario del pastor. El asunto fue incluso comentado por el obispo Hermes C. Fernandes, un activo activista progresista en las redes sociales, que consideró a André Valadão anticuado.