Asociación cristiana va al lugar del tiroteo en Texas para orar por las familias de los 19 niños asesinados
Un hombre armado de 18 años mató a 19 niños y dos adultos en una escuela primaria de Texas el martes. Incluso le disparó a su propia abuela antes de ser asesinado por la policía.
El crimen tuvo lugar en Uvalde, una ciudad mayoritariamente latina a unos 130 kilómetros al oeste de San Antonio, cerca de la frontera con México. El tirador fue identificado por la policía como Salvador Ramos.
La policía dijo que el joven le disparó a su abuela antes de dirigirse a la escuela. La anciana se encuentra en estado crítico, dijo el sargento del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Eric Estrada.
Después de dispararle a su abuela, Ramos condujo hasta la escuela y chocó contra una camioneta negra afuera de la escuela. Alrededor de las 11:30 am, ingresó a la escuela primaria Robb con un chaleco antibalas, una mochila y un rifle.
Entró en varias aulas y golpeó a varios niños y dos policías, antes de morir. Las edades de los niños asesinados por el pistolero oscilan entre 8 y 10 años, según las autoridades.
Los capellanes del Equipo de Respuesta Rápida de la Asociación Evangelística Billy Graham han sido enviados a Uvalde, donde se ha instalado un centro móvil donde la gente puede hablar y orar por ellos.
Este fue el tiroteo número 27 en una escuela estadounidense solo en 2022 y el más mortífero registrado en Texas. En medio de este telón de fondo de muerte y violencia, los líderes religiosos estadounidenses se unen en oración.
“El corazón de Estados Unidos fue arrancado en este triste día. Este fue un acto de pura maldad y niños inocentes pagaron el precio. Nos duele el corazón por sus familias”, dijo a Fox News el pastor Greg Laurie de Harvest Christian Fellowship.
Y agregó: “Creo que los niños pequeños que murieron están en el cielo, seguros en los brazos de Jesús”.
Walker Wildmon, vicepresidente de la American Family Association, cree que Estados Unidos necesita “desesperadamente” la intervención de Dios. “Estados Unidos está en un lugar muy oscuro moralmente y necesita desesperadamente que Dios intervenga y cambie los corazones y las mentes en esta tierra”, dijo. “Debemos apartarnos de nuestros malos caminos y reconocerlo”.
El pastor Franklin Graham, presidente de Samaritan’s Purse, lamentó la tragedia en Twitter: “Únase a mí en oración por estas familias devastadas y su comunidad. Que Dios los ayude y los sostenga como solo Él puede”.
