Pastor y esposa salvan de la muerte a 154 personas durante la ‘tormenta de nieve del siglo’

Abiertas las puertas de la iglesia para ayudar

Un pastor y su esposa mantuvieron abiertas las puertas de la iglesia para ayudar a 154 personas a sobrevivir a la “tormenta de nieve del siglo”, una tormenta histórica con temperaturas de -50°C que azotó el estado de Nueva York.

En la región de Buffalo (NY), al menos 40 personas murieron de frío justo antes de Navidad. La “tormenta de nieve del siglo” podría haber cobrado aún más víctimas si no fuera por la iniciativa del pastor Al Robinson y su esposa, Vivian, de recibir a 154 personas en el templo de la iglesia.

Las repercusiones de la acción comenzaron con un video publicado en Facebook por Nikki Tompkins-Ray, quien llevó a su familia a la iglesia Ministerio Urbano Espírito da Verdade. Según ella, la “pesadilla antes de Navidad” se convirtió en “un milagro navideño”.

“Estoy eternamente en deuda contigo [pastor y esposa]. Mi familia, nuestra pesadilla prenavideña, se convirtió en un milagro navideño. Yo agradezco. Alabo a Dios por ti. Oren por las familias aquí en Buffalo cuyos familiares no sobrevivieron a la tormenta”, dijo.

Nikki dijo que salió del trabajo la noche del 23 de diciembre y estaba tratando de llegar a casa con su familia cuando quedó atrapada en su automóvil durante la “tormenta de nieve del siglo”, el apodo que le dio a la tormenta la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul.

Decididos a no dejar morir a su madre

Dijo que llamó a sus hijos para contarles lo sucedido y que estaban decididos a no dejar morir a su madre. Entonces ellos, junto con su hermana y su cuñado, salieron de la casa para rescatarla en medio de la ventisca. Cuando finalmente la encontraron, se dieron cuenta de que su vehículo también había dejado de funcionar y la ciudad no tenía servicios de emergencia que pudieran ayudarlos.

“Desafortunadamente, el departamento de bomberos y el departamento de policía no pudieron comunicarse con nadie y, ya sabes, entiendo eso porque hay personas en situaciones peores que mis hijos y yo en el automóvil”, dijo, recordando que pensó ” si nos quedamos en este carro, van a encontrar seis cuerpos”.

Entonces, dijo Nikki, su hija publicó su ubicación en las redes sociales para buscar ayuda y alguien les dijo que no estaban lejos de la iglesia del Ministerio Urbano Espírito da Verdade, que está a unos 800 metros del lugar donde se había atascado el vehículo.

“Nosotros como familia empacamos lo que teníamos en el auto y caminamos a esta iglesia en medio de esta ventisca. Quiero decir, como durante ese tiempo cuando hubo una ventisca, el viento soplaba, había mucha nieve. Fue simplemente increíble. Algo como lo verías en una película”, informó, y agregó que usaron GPS para saber dónde estaban, ya que los letreros de las calles estaban cubiertos de nieve.

La esperanza para la familia

La esperanza para la familia ese día llegó en la forma de las luces de la iglesia, que todavía estaban funcionando en medio del corte de energía en el área: Vimos las luces de la iglesia y mi hija llamó a la Sra. Vivian y ella abrió las puertas. Déjame decirte, cuando esta mujer abrió la puerta, no vi nada más que un ángel. Ella nos dio la bienvenida. Nos calentó, sacó camas. Esta es la misma iglesia donde mi primo recientemente tuvo su funeral. Estuve allí hace unos meses, sin saber que esta sería la misma iglesia que abriría sus puertas para dejar entrar a mi familia durante la tormenta”.

Nikki dijo que sufrió las “primeras etapas de la congelación” cuando sus pantalones se congelaron en su piel. Ella y su familia se quedaron en la iglesia desde alrededor de las 3 am en la víspera de Navidad hasta el día de Navidad, y vieron cómo los pastores salvaron vidas al abrir la iglesia a completos extraños:

“Cuando llegamos allí, probablemente solo éramos nueve. Cuando partimos ayer (día de Navidad) esta iglesia abrió sus puertas, su corazón, a más de 100 personas. Sra. Vivian declaró que nunca antes había hecho algo así. Ella me dijo que estaba en la cama durmiendo y Dios le habló y le dijo ‘abre las puertas de tu iglesia’. Y ella lo hizo.”

“Por la cantidad de personas que conocimos durante esta tormenta, probablemente no habría conocido a ninguna de estas personas en mi vida. Quiero decir, había gente de todas las razas en esta iglesia. Y todos estábamos en la misma situación”.

El pastor Al Robinson concedió una entrevista a The Christian Post, afirmando que la pérdida de vidas en la tormenta fue “catastrófica”, y dijo que él y su esposa tomaron la iniciativa de recibir a 154 personas para que el mundo pudiera ver “la gloria de Dios”. ”.

“Hicimos esto para mostrar la gloria de Dios. Queríamos que la gente viera las brasas transformarse en un destello de luz de Jesucristo. Queríamos que la gente viera la luz de Cristo, el amor de Cristo. Es que somos sus manos y sus pies. Eso es todo lo que somos”, agregó el pastor.

“Te diré algo, el día de Navidad, esas 154 personas que estaban aquí, estaban cantando alabanzas a Cristo. Y tenían el don de la vida que les dio el mismo Jesucristo. Me pone la piel de gallina […] Era un nivel de gratitud que nunca, nunca había visto. No ves gratitud [así] hoy en día, simplemente no la ves. La gente espera que hagas algo por ellos. Esa es su actitud. […] Vi un nivel de gratitud, mi alma sintió un nivel de gratitud que nunca en mi vida había [visto]”, concluyó el pastor.

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