El ex primer ministro holandés y su esposa mueren juntos por suicidio asistido
El ex primer ministro de los Países Bajos , Dries van Agt, y su esposa, Eugenie, murieron juntos mediante doble eutanasia el 5 de febrero.
Según la fundación de Dries, The Rights Forum, ambos tenían 93 años y murieron tomados de la mano en un hospital de la ciudad holandesa de Nijmegen, donde vivían. Estuvieron casados durante 70 años.
Dries tuvo secuelas de una hemorragia cerebral, que sufrió en 2019, y optó por el suicidio asistido. La esposa, en cambio, no quería vivir sin su marido y también prefirió morir. El ex primer ministro gobernó Holanda entre 1977 y 1982.
El país, pionero en la legalización de la eutanasia, permite a las parejas morir juntas mediante suicidio asistido. Desde 2022 se han realizado 116 dobles eutanasias.
Cultura de la muerte en los Países Bajos
Los Países Bajos fueron el primer país en legalizar la eutanasia el 1 de abril de 2002. Sin embargo, la muerte asistida sólo está permitida a mayores de 12 años que puedan dar su consentimiento y a menores de un año con el consentimiento de sus padres.
Según datos oficiales, el número de casos de eutanasia en Países Bajos aumentó un 13,7% en 2022, totalizando 8.720 procedimientos, lo que representa el 5,1% de todas las muertes registradas en el país ese año.
En 2023, el gobierno holandés anunció que se prepara para regular la eutanasia para niños de entre 1 y 12 años que padecen enfermedades terminales.
Esta medida es una demanda de los pediatras desde hace años, que defienden la posibilidad de la muerte asistida de los menores.
De media, los casos de muerte asistida tienden a aumentar alrededor de un 10% al año en los Países Bajos, y la mayoría de las solicitudes las realizan pacientes con cáncer.
En Europa, los países que también permiten la eutanasia son: Bélgica, Luxemburgo, España y Portugal.
Las iglesias no están de acuerdo
En 2022, las iglesias protestantes holandesas enviaron una carta a la Cámara de Diputados emitiendo una advertencia. Los líderes cristianos dijeron que “aunque las enfermedades graves y potencialmente mortales pueden conducir a situaciones complejas y angustiosas, los niños no pueden tomar una decisión independiente al afrontar el final activo de la vida”.
El texto escrito por ellos fue publicado en el periódico Reformatorisch Dagblad. “Tememos que esta propuesta dé lugar a un debate sobre la posibilidad de la eutanasia para otros grupos de personas con discapacidad, como las personas con demencia grave. Esto es muy amenazante para las personas en circunstancias vulnerables”, escribieron además.
Además, las iglesias protestantes subrayaron en la carta que “es deseable y necesario que haya más inversión en cuidados paliativos”.
